El 30% de los trabajadores en blanco y el 70% de los empleados informales viven en situación de pobreza en Argentina, a pesar de tener ingresos estables y beneficios laborales.
En Argentina, más de 2 millones de trabajadores formales viven en situación de pobreza, alcanzando al 30% de los asalariados en blanco. La crisis económica y el ajuste del gobierno de Milei empeoraron la situación de los «trabajadores pobres», una problemática que también afecta al 70% de los empleados informales. Aunque los trabajadores formales cuentan con beneficios como aguinaldo y obra social, esto no es suficiente para superar la línea de la pobreza, evidenciando que tener un empleo en blanco ya no garantiza una vida digna. El fenómeno se intensificó en 2024, duplicando las cifras del año pasado.