La derrota electoral en Buenos Aires desató una crisis financiera: el riesgo país superó los 1.000 puntos y las acciones argentinas cayeron hasta un 15 %.
La contundente caída de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires puso en alerta roja a los mercados. En el premarket de Wall Street, los ADR de empresas argentinas registraron bajas de hasta un 15 %, incluyendo a Grupo Financiero Galicia y Edenor.
Al mismo tiempo, los bonos soberanos en dólares se hundieron hasta un 8 %, propulsando al riesgo país por encima de los 1.000 puntos básicos. Esa explosión en el indicador reflejó la desconfianza de los inversores sobre la continuidad del plan económico de Milei y Caputo.
