El Gobierno anunció que importará asado de Brasil a precios más bajos que los locales. La medida generó críticas en el sector ganadero, que la considera un golpe a la producción nacional. Expertos advierten sobre sus implicancias económicas y sanitarias.
El Gobierno anunció que Argentina comenzará a importar asado desde Brasil, una decisión que generó un fuerte debate en el sector ganadero. La carne importada llegaría a precios más bajos que los actuales en las góndolas argentinas, lo que despertó preocupaciones sobre su impacto en la producción local.
Carlos Federico Kohn, magíster en agronegocios y consultor del sector, cuestionó la medida y la calificó como un “despropósito” en un país con una fuerte tradición ganadera. “Sorprende que una nación que busca mejorar la producción y calidad de su ganado termine recurriendo a importaciones”, declaró.
