Mientras el Gobierno afirma que la economía muestra signos de recuperación, 16.500 pymes cerraron sus puertas en lo que va del año, afectadas por la caída del consumo y costos elevados. El sector enfrenta una crisis profunda.
Mientras el Gobierno sostiene que la recesión terminó y que la economía empieza a recuperarse, el panorama de las pequeñas y medianas empresas (pymes) en Argentina es alarmante. En lo que va del 2024, 16.500 pymes cerraron sus puertas, según el Frente Productivo Nacional. Este número refleja una profunda crisis en el sector que, además, enfrenta la caída del consumo interno, el aumento de los costos de servicios y la dificultad de exportar debido a un dólar poco competitivo.
La situación de las pymes se agrava con el cierre de 10.000 kioscos y almacenes, y la pérdida de aproximadamente 160.000 puestos de trabajo. La Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) indicó que la segunda mitad del año ha sido particularmente complicada, poniendo a estas empresas en una situación crítica y cercana al colapso.