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En la reciente 25ª Conferencia Internacional sobre Sida 2024, un nuevo avance médico ha capturado la atención mundial: una inyección de Lenacapavir, administrada cada seis meses, ha demostrado un 100% de efectividad en la prevención del VIH.

Este logro se verificó en un estudio llamado Purpose I, que involucró a más de 5,000 mujeres heterosexuales de entre 16 y 25 años en Sudáfrica y Uganda. Los resultados fueron tan impactantes que el estudio se interrumpió antes de tiempo porque ninguna de las participantes que recibió la inyección contrajo el virus.

El Lenacapavir pertenece a una nueva familia de antirretrovirales y representa una revolución en la profilaxis preexposición (PrEP), que desde su aprobación en 2012 por la FDA, ha beneficiado a millones. Sin embargo, las limitaciones en acceso y adherencia han dejado a muchas mujeres vulnerables. Este nuevo tratamiento podría cambiar radicalmente el panorama al ofrecer una alternativa más accesible y eficaz.

El doctor Pedro Cahn, director científico de la Fundación Huésped, señala que aunque los resultados son prometedores, se debe proceder con cautela. El tiempo de observación ha sido corto y se requiere más investigación para confirmar su efectividad a largo plazo, especialmente en poblaciones distintas como hombres que tienen sexo con hombres y mujeres transgénero. Para esto, se está llevando a cabo un segundo estudio, Purpose II, en el que Argentina participa activamente.

Omar Sued, asesor regional de la OPS para VIH-sida, explica que el Lenacapavir ya se usaba como tratamiento para pacientes con resistencia a otros fármacos y ahora su uso preventivo ha mostrado resultados sin precedentes. Aunque el tratamiento inyectable requiere una infraestructura más compleja que la medicación oral diaria, su efectividad total marca un avance significativo en la lucha contra el VIH.

Con la mitad de las 1,3 millones de nuevas infecciones anuales afectando a mujeres, este avance podría ser un cambio de juego en la lucha mundial contra el VIH. El estudio continúa evaluando su impacto en otras poblaciones, con la esperanza de que este tratamiento pueda convertirse en una herramienta clave para erradicar el virus.