Un estudio reciente de LendingTree reveló que el 73 % de quienes prestaron plata a allegados no recuperaron el total del dinero
Un 25 % reconoció que el vínculo se resintió, y un 43 % se arrepintió de haber prestado de forma tan informal . En concreto, casi todos los préstamos se hicieron sin papeles, sin fechas claras ni condiciones oficiales. Justo por eso, expertos recomiendan tratarlos como microcréditos: poner montos exactos, plazos y un acuerdo firmado, para no basarse solamente en la confianza.
Estos préstamos informales ocurrieron en el ámbito privado, entre conocidos que buscaban una “mano” rápida para pagar algún gasto —reparar el auto o cubrir una cuenta bancaria, por ejemplo— pero sin armar ningún tipo de papel o contrato .
