Un empresario argentino cercano a Liam Payne, junto a un empleado de hotel y un dealer, fue acusado de abandono de persona en la investigación por la muerte del artista británico. La justicia apunta a negligencias y encubrimiento en los últimos días de Payne.
La sorpresiva muerte de Liam Payne en Argentina desató una investigación que apunta a tres personas claves en los últimos días del cantante en el país: un empresario argentino cercano al músico, un empleado de mantenimiento del hotel donde se hospedaba y un dealer. Los tres fueron imputados por distintos delitos, entre ellos el abandono de persona.
El empresario, quien se hacía pasar por el “manager” de Payne pero que en realidad no era su representante oficial, quedó en el foco de la investigación. Las autoridades lo acusan de no haber asistido al cantante cuando este sufrió una recaída con las drogas, ocultando además esta situación a la familia del artista. Según la investigación, el 16 de octubre, día de la muerte de Payne, los investigadores intentaron contactarlo a través de los teléfonos que habían sido proporcionados por el personal del hotel, pero no hubo respuesta. Su ausencia generó sospechas y ahora deberá responder ante la justicia por abandono de persona, una figura penal grave en Argentina.