Arcangela Sberna, de 75 años, se convirtió en abanderada al graduarse en Lomas de Zamora. Su papá no la dejó estudiar de joven, pero ella nunca abandonó su sueño y hoy lo cumplió con orgullo.
Arcangela Sberna, o Angie como le dicen cariñosamente, tiene 75 años y acaba de cumplir un sueño que esperó más de seis décadas: terminar la secundaria. Pero no solo eso, también fue elegida abanderada en el acto de graduación del Centro Educativo Nivel Secundario N° 454 «Martín Miguel de Güemes» en Lomas de Zamora.
“Si pudiera hablar con la niña que fui, le diría: lo logramos”, confesó emocionada Angie, que este 19 de diciembre cerró una etapa pendiente desde su infancia. De joven, su padre, un inmigrante italiano con ideas tradicionales, no le permitió seguir estudiando después del primario. “Decía que la mujer debía ser de su casa, ocuparse del marido y los hijos. Yo soñaba con ser maestra, pero no se pudo”, recordó.