Ryan Reynolds y Robert McElhenney invirtieron 200 millones de dólares en Alpine, escudería de Fórmula 1.
La Fórmula 1 suma un toque de Hollywood con la llegada de Ryan Reynolds y Robert McElhenney a Alpine. Los actores, reconocidos por su exitosa incursión en el fútbol con el Wrexham AFC, invirtieron más de 200 millones de dólares para adquirir el 24% de la escudería francesa.
Esta movida no solo refuerza el perfil mediático de Alpine, sino que también abre nuevas puertas para Franco Colapinto, el joven piloto argentino que se incorpora como piloto de reserva. A sus 20 años, Colapinto está listo para dar el salto hacia los niveles más altos del automovilismo, en un equipo que combina inversión, ambición y proyección internacional.