Este miércoles falleció a los 94 años Gena Rowlands, la icónica actriz estadounidense reconocida mundialmente por su papel como Allie en la película «Diario de una pasión». La noticia conmocionó al mundo del cine, ya que Rowlands dejó una huella imborrable en la industria con su talento y carisma. La actriz murió en su residencia de Indian Wells, California, rodeada de su familia, incluyendo a su esposo Robert y su hija Alexandra Cassavetes.
Aunque aún no se han determinado oficialmente las causas de su muerte, se supo que Gena había estado luchando contra la enfermedad de Alzheimer en sus últimos años. A lo largo de su extensa carrera, Rowlands recibió numerosos reconocimientos, destacándose el Óscar honorífico que le fue otorgado en noviembre de 2015 por su contribución al cine y su influencia como actriz.
En 2011, fue nombrada «la actriz de cine más importante y original de más de medio siglo», un título que refleja el impacto que tuvo en el mundo del cine. Su partida marca el fin de una era en Hollywood, dejando un legado que perdurará en la historia del cine y en el corazón de sus seguidores.