El sueño de la fiesta de egresados terminó en una pesadilla. Cientos de estudiantes de Mendoza, que pagaron miles de pesos para su cena de fin de curso, se encontraron con salones vacíos: fueron víctimas de una estafa masiva.
El escándalo se desató el sábado 29 de noviembre cuando los chicos de la escuela Dr. Eduardo J. Chahla llegaron al salón de eventos y descubrieron que el dueño de la empresa, Mauricio Morales, no había contratado ni pagado nada. El organizador había enviado un mensaje asegurando que tuvo un accidente para justificar la cancelación. Padres que fueron al lugar contaron que solo había un par de pizzas y gaseosas, mientras el personal ya levantaba sus cosas porque no les pagaron. “No había nada, nada, el salón estaba completamente vacío”, dijo una de las madres, Gisel Soria.
