Un estudio del CONICET revela que la piel roja del maní tiene propiedades antivirales que inhiben el dengue. Un avance sostenible con potencial para países en desarrollo
La ciencia argentina sigue marcando el camino en innovación y sostenibilidad. Investigadores del CONICET descubrieron que la piel roja del maní, un subproducto industrial generalmente desechado, posee potentes propiedades antivirales capaces de inhibir la replicación del virus del dengue en distintas etapas de su ciclo.
Carola Sabini, líder del equipo de investigación, explicó que en ensayos in vitro el extracto demostró ser efectivo incluso en bajas concentraciones, específicamente contra el serotipo 2 del dengue. “Actúa desde la adsorción del virus hasta su replicación, además de tener acción virucida directa”, detalló Sabini. Este hallazgo abre nuevas puertas para el tratamiento y la prevención de esta enfermedad que afecta principalmente a países de climas tropicales y recursos limitados.