Un joven de 23 años fue detenido tras ser acusado de asesinar a su hijastro de siete meses. El presunto asesino, que estuvo un mes prófugo, se negó a declarar cuando fue indagado. La víctima sufrió un edema cerebral que le ocasionó la muerte.
El trágico episodio ocurrió en San José, cuando la madre de la víctima dejó a su bebé al cuidado de su pareja. El padrastro habría golpeado al bebé, causándole una grave herida.
Tras el incidente, el acusado huyó y comenzó una exhaustiva investigación para encontrarlo. Finalmente, fue detenido en una vivienda en Ingeniero Allan, Florencio Varela. La fiscal Marcela Juan imputó al joven por “homicidio agravado por alevosía, en el contexto de maltrato a las infancias y violencia de género”.