Japón marcó un hito al instalar la primera estación de tren impresa en 3D en la ciudad de Arida. Con un ensamblaje en solo seis horas, la estructura combina eficiencia, bajo costo y un diseño inspirado en la cultura local.
Japón volvió a demostrar su liderazgo en innovación al instalar la primera estación de tren impresa en 3D del mundo. Ubicada en la estación Hatsushima, en la ciudad de Arida, esta estructura de 10 metros cuadrados reemplazó una antigua edificación de madera en mal estado.
Lo más impactante del proyecto es su velocidad de construcción: en solo seis horas, la estación quedó ensamblada gracias a la impresión previa de sus componentes en una fábrica especializada. Este método no solo acelera los tiempos de obra, sino que también reduce costos y minimiza el desperdicio de materiales, haciendo que la infraestructura ferroviaria sea más sostenible y eficiente.
