Un error de diseño en la nueva identidad visual de la Cancillería generó un escándalo político y social que obligó a las autoridades a reemplazar el logo a pocos minutos de su publicación. El motivo fue que la imagen no incluía a las Islas Malvinas ni a la Antártida Argentina.
El Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de Argentina, liderado por Diana Mondino, presentó un nuevo logo institucional que buscaba unificar la imagen del Gobierno. El diseño integraba el escudo nacional sobre un planisferio en tono dorado. El grave problema surgió al notarse que, en el mapa de fondo, faltaban los territorios de las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y la Antártida Argentina, cuya soberanía es una causa histórica del país.
