Un avance científico crucial permite monitorear el nivel de estrés y ansiedad de una persona de forma no invasiva, utilizando un pequeño sensor sin cables que interactúa con el teléfono móvil. Este dispositivo simplificará el seguimiento de afecciones crónicas y el rendimiento deportivo, analizando la hormona del cortisol.
El sensor fue diseñado por un equipo de investigadores de Caltech y la Universidad de California, con Wei Gao y Chuanzhen Zhao a la cabeza. Su mecanismo es revolucionario: no requiere batería y se activa al acercarlo a un smartphone o a un lector, exactamente como funciona el sistema de pagos sin contacto (NFC).
Este invento registra los cambios en los niveles de cortisol, una hormona que se dispara en el cuerpo ante situaciones de tensión, lo que lo convierte en un marcador directo de ansiedad. El sensor es capaz de detectar variaciones mínimas y funciona perfectamente incluso con la persona en constante movimiento. El proyecto ya ingresó a la etapa de validación clínica, lo que permitirá evaluar su uso masivo en entornos médicos y de entrenamiento deportivo.