El Grupo Prada anunció la finalización de la compra de su rival Versace en un acuerdo que alcanzó un valor cercano a los 1.400 millones de dólares, buscando redefinir el mapa del lujo global.
El acuerdo, formalizado este martes, tiene como principal objetivo reactivar el potencial de Versace, que experimentó un rendimiento mediocre desde 2020, cuando era parte del grupo estadounidense Capri Holdings. La dirección de Prada aseguró que la marca fundada por los hermanos Gianni y Donatella Versace mantiene un «significativo potencial de crecimiento» que buscarán capitalizar.
