Francia acaba de inaugurar en las afueras de París el primer tramo de ruta capaz de recargar vehículos eléctricos por inducción mientras están en movimiento.
Francia encendió oficialmente el primer tramo de autopista del mundo diseñado para cargar coches eléctricos sin necesidad de que se detengan. A las afueras de París, un segmento de 1,5 km ya está activo. La medida busca acelerar la transición hacia la movilidad eléctrica, eliminando la principal barrera para los usuarios: la necesidad de detenerse en una estación de carga por largos periodos de tiempo.
El sistema funciona mediante bobinas de carga instaladas bajo el asfalto que transmiten energía por inducción a los vehículos que pasan por encima. Esto es similar a cómo se cargan los teléfonos móviles de forma inalámbrica, pero a una escala mucho mayor. La tecnología, desarrollada por Electreon y validada por la Universidad Gustave Eiffel, es potente, ya que es capaz de entregar hasta 200 kW de energía a autobuses, camiones y automóviles.