La política brasileña ya tiene su primer gran definición: el presidente Luiz Inácio Lula da Silva confirmó que intentará gobernar Brasil por un cuarto período en 2026. La noticia fue una bomba que salió de Yakarta, Indonesia, a miles de kilómetros de Río de Janeiro.
El anuncio lo hizo el propio Lula da Silva este jueves, al terminar un encuentro oficial con el presidente indonesio, Prabowo Subianto, en medio de una gira para potenciar las relaciones comerciales de Brasil en el Sudeste Asiático. Según el reporte oficial, el mandatario brasileño afirmó: «Voy a disputar un cuarto mandato en Brasil». Aunque el actual presidente tiene 79 años, su intención es clara: seguir en el poder hasta 2030, completando así cuatro mandatos no consecutivos.
Para entender la magnitud, Lula ya gobernó Brasil en dos períodos entre 2003 y 2011, y regresó al poder el 1 de enero de 2023. Su postulación, entonces, lo coloca de nuevo en el centro de un escenario electoral que se anticipa polarizado, como ya ocurrió en 2022. La confirmación pone en marcha toda la estrategia política de la oposición brasileña, que ahora deberá definir una figura que compita contra el líder del Partido de los Trabajadores.
